martes, 5 de octubre de 2010

El valor de educar

Prólogo:
            Escuela como correctora de insuficiencias culturales, pero no de enseñanza de valores que van en contra de la violencia, drogas, etc.
            Si dicen que los maestros son fracasados por consiguiente la sociedad actual también lo será. No se debe admitir este comentario cuando los catedráticos difusores de la investigación científica y del avance dependen de ellos pues son los que preparan a las futuras personas que trabajarán con ellos.
            A ti de pequeño te dieron una educación religiosa y ahora ya ves: ateo perdido, no creo que las intenciones de los educadores cuenten finalmente mucho  y hasta pueden resultar contraproducentes”. Al final cada uno seguirá su interior y sus creencias según su uso de razón; sin embargo para llegar a ello habrá sido necesaria una educación la cual muchas veces equivocada para unos hará que éstos razonen y les lleve  a unas creencias u otras, en el caso anterior el ateísmo por ejemplo. Aun así, habrá sido necesaria.
            Se resalta la educación como punto fundamental de la filosofía actual.
Capítulo2:
            Lo primero que se transfiere con la educación es que debemos relacionarnos con los demás, puesto que no somos individuales. Lo segundo es que el mundo es una fuente de distintas culturas. Esto es considerado por el autor como: Sociedad y tiempo.
            Para transmitir una enseñanza será necesario haber vivido experiencia, de ahí que un joven pueda a enseñar a un anciano puesto que tal vez ese joven ha vivido la experiencia de lo que se quiere enseñar pero de ahí que una persona mayor también pueda enseñar a un joven. Todos aprendemos de todos “por eso tal vez hayamos sido alguna vez maestros”.
            No se puede decir que la educación está en contra de la instrucción y viceversa puesto que van conjuntas de la mano. Pero sí distinguiremos entre educación abierta (razonar, debatir, pensar, etc.) y cerrada (“esto es así porque sí y apréndelo”). Ésta última se podrá comparar con el plan bolonia y el plan actual de enseñanza, donde el primero será más una enseñanza de búsqueda y de trabajo continuo y el segundo una enseñanza de directo mando o pseudodirecto mando.

Carlos Herrero López

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